En los Ćŗltimos dĆas se han producido informaciones que no sĆ³lo apuntan en la direcciĆ³n de una mayor flexibilizaciĆ³n monetaria, sino que la refuerzan
Conocedores de que en las decisiones de la autoridad monetaria dominicana siempre habla la experticia, el 24 de septiembre habĆamos previsto reducciones adicionales de tasas por parte del Banco Central a la dispuesta el 29 de agosto, cuando bajĆ³ en 25 puntos bĆ”sicos su tasa de polĆtica monetaria, disminuyendo de 7.00 % a 6.75 % anual. āHay razones con buen fundamento que dan espacio al Banco Central para hacer una nueva movida a la baja de su tasa de polĆtica monetariaā, decĆamos.
Y apenas dos dĆas despuĆ©s, en un comunicado para informar el comportamiento de la economĆa a agosto, el Banco Central confirmaba su intenciĆ³n de disponer nuevas reducciones de tasa, al afirmar que la reducciĆ³n de 50 puntos bĆ”sicos de la tasa de polĆtica monetaria de la Reserva Federal, resolutada el 18 de septiembre, ābrinda mayor libertad para implementar polĆticas monetarias a nivel domĆ©stico que apoyen el crecimiento econĆ³mico sin comprometer la meta inflacionariaā.
En dos razones nos apoyĆ”bamos para prever nuevas movidas hacia la baja de la tasa de interĆ©s de polĆtica monetaria domĆ©stica: la de que la reducciĆ³n de la tasa dispuesta por la Reserva Federal habĆa sido el doble de la reducciĆ³n que previamente habĆa hecho el Banco Central, que fue de 25 puntos bĆ”sicos y la de que la tasa de inflaciĆ³n domĆ©stica estaba dentro del objetivo meta de la polĆtica monetaria, en un escenario de crecimiento sin amenaza de sobrecalentamiento de la economĆa.
Ambos factores, explicƔbamos, daban mayor espacio a la autoridad monetaria domƩstica, para continuar reduciendo la tasa de interƩs.
Y en los Ćŗltimos dĆas se han producido informaciones que no sĆ³lo apuntaban en la direcciĆ³n prevista, sino, que la reforzaban: la inflaciĆ³n de EEUU medida por el deflactor del gasto en consumo personal (PCE), sorprendiĆ³ a la baja en agosto, lo que allana el camino de la Reserva Federal para seguir recortando los tipos de interĆ©s. El deflactor general PCE registrĆ³ en agosto un avance del 2,2% interanual frente al 2,5% de julio y el 2,3% esperado.
De ahĆ que el mercado estĆ© no solo asumiendo que la Reserva Federal va a volver a bajar la tasa en noviembre, sino, que, incluso hay quienes piensan que podrĆa volverlo a hacer en grande, con otra reducciĆ³n de 50 puntos bĆ”sicos.
SegĆŗn la herramienta FedWatch, que recoge el ābaileā de los futuros, los operadores dan ya mĆ”s de un 50% de probabilidades al recorte de 50 puntos bĆ”sicos en noviembre. Hasta ahora ese porcentaje se mantenĆa justo por debajo del 50%.
Ā«Este informe de PCE mantiene vivas las esperanzas de un recorte de 50 puntos bĆ”sicos en noviembre, pero las nĆ³minas siguen siendo la clave de cara al futuroĀ», sintetiza Ole S. Hansen, estratega de Saxo Bank, mientras que Jesse Cohen, analista de mercados de Investing, considera que Ā«los frĆos datos de inflaciĆ³n apoyan otro recorte de tipos de 50 puntos bĆ”sicos en noviembreĀ».
O sea, todos los caminos conducĆan, sin riesgo a sorpresas que hagan perder el rumbo, a una mayor flexibilizaciĆ³n de la polĆtica monetaria. De manera que la decisiĆ³n de ayer del BC de bajar la tasa en otros 25 puntos bĆ”sicos, no debiĆ³ tomar por sorpresa al mercado y es de esperar que las tasas bancarias inicien en este mes un proceso gradual a la baja.