Es necesario prestar atención al conflicto que enfrenta a la empresa Simón Díaz Producción y al Comité de Manejo del Estadio Olímpico “Félix Sánchez”.
La empresa ha anunciado un tercer concierto del grupo Aventura, liderado por Romeo Santos, programado para el próximo 29 de diciembre. Incluso, las entradas ya están a la venta. Sin embargo, el
Comité de Manejo ha declarado públicamente que no ha autorizado la realización de dicho evento ni de ningún otro similar.
Este enfrentamiento no debe ser tomado a la ligera.
El Estadio Olímpico, actualmente en proceso de remodelación, se convertirá en un símbolo de avance y modernización para el deporte dominicano.
Esta infraestructura deportiva está siendo renovada con una inversión significativa de RD$950 millones.
La primera etapa de esta remodelación ya permitió el exitoso montaje del Campeonato Mundial de Fútbol Femenino Santo Domingo 2024.
Los trabajos continuarán para que el estadio esté listo para la inauguración, las competiciones y la clausura de los Juegos
Centroamericanos y del Caribe Santo Domingo 2026.
El Comité de Manejo, compuesto por representantes del Ministerio de Vivienda y Edificaciones, el Ministerio de Deportes y el Comité Organizador de los Juegos, ha dejado claro que el estadio no albergará eventos que no estén relacionados con el deporte.
Sin embargo, parece que la empresa Simón Díaz Producción, conocida por sus vínculos con el Partido Revolucionario Moderno (PRM), se perfila como un “hueso duro de roer” para el Comité.
En conversación con una fuente cercana a la empresa, ésta me aseguró que las declaraciones del Comité “no tienen peso” y que el concierto del 29 de diciembre está asegurado, respaldado por acuerdos de alto nivel en el Palacio Nacional. Según esta fuente, “nada ni nadie detendrá el espectáculo”.
Frente a esta situación, es crucial reafirmar la seriedad y la responsabilidad del Comité de Manejo.
Confío plenamente en su capacidad para mantenerse firme en su postura, preservando no solo la integridad de la instalación deportiva más importante del país, sino también el respeto hacia la millonaria inversión estatal.
Permitir que intereses particulares se impongan sobre decisiones estratégicas, sería un grave error.
La modernización del Estadio Olímpico debe priorizarse por encima de cualquier evento que pueda poner en riesgo su infraestructura y su propósito deportivo.
¡Ojo al conflicto! Este tema merece toda nuestra atención y respaldo.
Por: Héctor García
hectorgarciasr@gmail.com
