Jerusalén, (EFE).- Al menos 128 palestinos murieron el sábado en la Franja de Gaza -incluidos 31 que esperaban ayuda humanitaria en puntos de distribución- en lo que fue la jornada más mortífera de la última semana, informó el Ministerio de Sanidad del Gobierno de Hamás en el enclave.
En total, a los hospitales gazatíes llegaron a lo largo de la pasada jornada 130 cadáveres, según Sanidad, ya que los rescatistas de los servicios de emergencias recuperaron además dos cuerpos que permanecían desaparecidos hasta ahora.
Es la cifra más alta en la última semana, si bien los ataques israelíes han provocado en torno a 100 muertos diarios prácticamente todos los días.
En la ciudad de Gaza (norte) al menos 16 personas murieron en cuatro ataques distintos, según fuentes locales– siete en un bombardeo contra tiendas de campaña cerca de la escuela Al Tabiin, una mujer y un niño en un ataque cerca de una mezquita en el oeste de la ciudad y otras dos otro ataque en el barrio de Zeitún.
Un dron israelí atacó además una tienda de campaña que albergaba a personas desplazadas en el barrio de Al Daraj, en el centro de la ciudad, provocando la muerte de cinco personas y dejando varios heridos.
En Rafah, al sur del enclave, al menos 31 personas murieron y más de 107 resultaron heridas cuando tropas israelíes abrieron fuego contra miles de gazatíes que aguardaban el reparto de alimento cerca de dos puntos militarizados de distribución respaldados por EE.UU.
El Ejército israelí confirmó que sus tropas realizaron “disparos de advertencia” en la zona y aseguró estar investigando lo ocurrido.
Desde el inicio de la ofensiva militar israelí el 7 de octubre de 23023, al menos 58.895 palestinos han muerto y 140.980 han resultado heridos, según el balance actualizado del Ministerio de Sanidad gazatí.
La ofensiva comenzó ese día como una represalia al ataque de los milicianos gazatíes, con Hamás a la cabeza, que penetraron en territorio israelí y mataron a unas 1.200 personas, además de secuestrar a 251. De estas, 50 siguen en Gaza aunque sólo unas 20 siguen con vida.
