LOS ÁNGELES.- Es apropiado que en una ciudad construida sobre el cine y la televisión, a JJ Redick le guste usar un término popular entre los directores para referirse a diferentes momentos de su primera temporada como entrenador de los Lakers de Los Ángeles.
El jueves por la noche, los Lakers le brindaron a Redick otro momento memorable.
Los Ángeles comenzó una racha de cinco juegos contra algunos de los mejores equipos de la NBA con una victoria en tiempo extra de 113-109 sobre los New York Knicks.
Los Lakers han ganado ocho partidos consecutivos y están segundos en la Conferencia Oeste con 40-21.
«Nuestros muchachos, en lo que por momentos parecía un partido de playoffs, realmente lograron ganar con mucho esfuerzo», dijo Redick.
Los Lakers perdían por dos dígitos a mitad del cuarto período, pero se recuperaron para forzar la prórroga.
El partido estaba empatado a 107 (con tiros libres del lesionado Jalen Brunson, estrella de los Knicks ) hacia el final de la prórroga, antes de que Los Ángeles cerrara el encuentro con una racha de 6-2.
“No hemos tenido muchos de esos partidos porque, francamente, últimamente hemos tenido la ventaja muchas veces”, dijo Redick.
“Creo que es un buen recordatorio para nuestro grupo de cara al futuro de que podemos ganar partidos como este en los que no estamos en nuestro mejor nivel ofensivo, en los que tenemos un comienzo lento en defensa, pero tenemos suficiente dureza y determinación para ganar estos partidos”.
En una noche en la que Luka Doncic lideró a los Lakers con 32 puntos y LeBron James añadió 31, fueron otros jugadores los que también dieron un paso al frente cuando fue necesario.
Gabe Vincent anotó tres triples en el último cuarto y Jaxson Hayes convirtió un par de tiros libres para darle a los Lakers una ventaja de 109-107. Austin Reaves acertó 2 de 13 tiros de campo después de perderse dos partidos de bido a un esguince en la pantorrilla derecha, pero anotó un triple en el tiempo extra.
